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“ Ahora entiendo más
como funciona el capitalismo”
Érika Sebastián Luis
18 de Marzo,
Monterrey, Nuevo León. Ahora entiendo más como funciona el
capitalismo, eran las palabras de Érika al observar la realidad del
municipio de San Pedro Garza García y Monterrey Nuevo León,
paisajes que dejan ver uno de los lugares en donde más se han
consolidado las relaciones sociales capitalistas; grandes edificios,
acumulación, devastación de la madre tierra y una guerra permanente
contra su población, características cotidianas en la capital
regia.
En esta ocasión el
encuentro solidario con Álvaro Sebastián Ramírez se realizo en la
“Biblioteca El portón negro”, espacio que trabaja en torno a
los ejes de autonomía, autogestión, trabajo colectivo y promueve
visiones críticas y libertarias de la realidad.
Después de que Érika
compartió la historia y situación de Álvaro surgieron diferentes
muestras de solidaridad y apoyo. - Álvaro es una inspiración para
nuestras luchas, podemos ver que aunque adentro de esos centros de
exterminio los tienen siempre con la cabeza agachada ellos no estan
solxs y afuera están sus familiares que llegan siempre con la cabeza
en alto y con dignidad a seguir luchando -
En otro momento se
comparte un audio del testimonio de la señora Cecilia, compañera de
Zacarias quien junto con Álvaro se encuentra preso en el CEFERSO no.
13 en Miahuatlan. Zacarias es uno de los 7 presos de la región
Loxicha que hasta la fecha continúan presos ilegalmente. En este
audio se escuchaba a su joven hija diciendo que – este centro de
exterminio realmente los esta destrozando – e invitaba a que se
analice la situación y se decida a quien se le cree, a
ellos que siguen manipulando la información o nosotrxs quienes
sabemos lo que sucede en verdad.
Dentro del diálogo se
recuerdan a las familias que en el norte también han estado y están
luchando, como el caso de las familias de Pasta de Conchos, quienes
después de 8 años del accidente minero algunas siguen unidas y
luchando para hacer justicia ante la tragedia que le arrebato la vida
a hombres trabajadores y provoco el dolor en el corazón de 63
familias.
Al terminar el encuentro
se pone al centro el dolor que une a ambas realidades, por un lado la
injusta e ilegal prisión del compañero Álvaro Sebastián Ramírez
y por otro el dolor ocasionado por la violencia en el noreste del
país, y una vez que se abre el corazón y se comparte desde el dolor
es más sencillo el tejer las rabias para así solidariamente
fortalecer las luchas que se dan en las geografías distantes de
Nuevo León y Oaxaca.